martes, 7 de junio de 2022

PEGASO EUROPA PIENSOS COMPUESTOS UVESA

 

PEGASO 1065 L "EUROPA" – PIENSOS COMPUESTOS “UVESA”


Hacia el ecuador de los años 60 el fabricante español de camiones Pegaso decidió que ya era hora de cubrir el vacío existente entre los pequeños Comet, de bajo tonelaje, y los de la serie 1060 y 2011 - los afamados “cabezones” - que se encargaban de las rutas de largo recorrido, así como de las grandes y sufridas cargas.


Pegaso buscaba ofertar un producto intermedio, que pudiera hacer de puente entre unos y otros. Por eso se incidió en la versatilidad del chasis, especialmente en su longitud, y así poder acortar o alargar la distancia entre ejes, de forma que las diferentes versiones ofrecieran la máxima polivalencia.


Se le dotó de un motor de seis cilindros y algo más de 10.000 cm3 que arrojaban unos 170 CV de potencia, con una caja de velocidades de seis marchas. Más adelante se le acoplaría un multiplicador en la palanca de cambio de cuatro relaciones, para otorgarle un número final de ocho marchas. En ruta debía tener una capacidad máxima de 16 toneladas de peso para cumplir con las nuevas normas europeas de transporte.


Para hacer algo más agradable la estancia al chófer, también se modificó la cabina, alargándola unos 25 centímetros más que la de su hermano pequeño el Comet, de la que derivaba, y darle a su vez unos pasos de rueda mayores para poder embutir unas ruedas más grandes, como así requería el mayor peso que debía manejar.


Como se ha dicho, hubo varias longitudes de bastidor, y con el discurrir de los años, debido al aumento de la permisividad en las toneladas por eje que la normativa europea iba modificando, se aumentaron también las motorizaciones y los refuerzos de los chasis. Se llegó a motores de 200 CV en este modelo para una carga máxima de 20 toneladas. También se creó las correspondientes versiones en tractora, denominadas 2020 y 2022, capaces de arrastrar 32 toneladas.


- - - - -


Con solo realizar una búsqueda en internet con la palabra “UVESA”, puede comprobarse rápidamente que muchos coleccionistas ya han expuesto este modelo en su particular blog, en su “Cara-Libro” o bien en los diversos foros que aglutinan más o menos a los aficionados españoles del diecast.


Así que yo tampoco me he podido resistir a enseñar el mío, aunque se trate de un modelo ya muy visto, y que aparentemente no debería ofrecer grandes novedades. No olvidemos que se trata de un regalo de la actual colección en curso denominada Camiones y Autobuses Españoles, de Salvat.


Y no. No percibo royalties, ni descuentos, ni tengo nada que ver con la editorial. Solo soy un consumidor más. Y si la nombro es porque me da la gana, y porque cuando hacen bien las cosas, justo es reconocérselo. De la misma forma que cuando el número de turno no satisface del todo al cliente, pues algún “palo” también se llevan. Si alguien se toma la molestia de leer alguna de las entradas anteriores, podrá comprobar que no me muerdo la lengua, ni para bien ni para mal. Ni tampoco me sofreno con algunos sectores de la afición. Pero todo ésto solo es prensa amarilla.


Sobre la propia miniatura, la verdad es que estaba bastante ilusionado con este regalo. En las fotos de promoción, de gran detalle, aparece con un muy buen acabado. Por eso no me importó que este regalo se tratara de otro Europa. Ya tengo el “Juanito”, el cisterna de Solazo y el capitoné mudancero de Signes, de la anterior colección Pegaso, por lo que un camión como éste, sería bien recibido. 


Resumiendo, diré que no es una mala miniatura, pero tiene aspectos negativos que le restan puntuación. Como digo, una cosa es el modelo y sus fotos de promoción, y otra la unidad que nos llega a nosotros, y que es desnudada por la implacable lente de nuestras cámaras.

Como parte positiva, se han esmerado en darnos una cabina bien moldeada, con una pintura aplicada con suficiencia, y que permite apreciar con claridad el característico corrugado del fabricante del camión. Además trae unos retrovisores adecuados y unos finos limpiaparabrisas, que me hace recordar aquellos espectaculares Pegasos publicados en la citada colección de la marca.


Hay alguna que otra luz pintada, pero siempre insertadas en la cabina como piezas independientes, y sobre todo tenemos un magnífico frontal, con un logotipo diría que perfecto, unos pinchos en los faros casi inapreciables, y una visera muy apañada, con buena grafía.


Lo que quizás me haya decepcionado un tanto de este modelo ha sido la terminación general. Repito que es una miniatura que para mí saca muy buena nota, pero el ensamblaje de las partes no ha sido afortunado. Como puede apreciarse en la foto frontal, el camión está “escacharrado” hacia un lado, producto del mal encaje de las partes superiores en el chasis. Y en cuanto a la tolva, el sinfín, y demás grifería, se nota que son mitades y partes unidas entre sí con poco acierto. Eso ha provocado que las letras de UVESA estén partidas y la "falla de San Andrés" se vea rápidamente y a simple vista.  Las calcas de la cabina también han sido puestas de aquella manera, sin amoldarse del todo al corrugado de la chapa.

El modelo que nos ocupa se trataría del 1065 L, es decir, un chasis largo que junto a la cabina conformaría una longitud total de casi ocho metros aproximadamente, frente a los cerca de siete que tendría la versión básica.  Repartidos por el resto del chasis, se aprecia una rueda de repuesto, un calderín esférico y un depósito de combustible que corresponderían a las versiones iniciales de la década de los sesenta, con su motor de 170 CV para una carga de 16 toneladas.

Sin embargo la placa de peso indica 20 toneladas de carga máxima autorizada, por lo que este camión debería ser una versión más tardía en el tiempo y de 200 CV de potencia, lo que obliga a tener un calderín con forma de caja, y dos ruedas de repuesto al final del chasis. Éste, a su vez, debería ser algo más grueso o tener algún refuerzo. Por tanto, aunque bien detallados, los bajos no se corresponderían a mi entender con la versión reproducida, que sería de las últimas y más potentes que hubo de este modelo, ya bien entrada la década de los setenta.

A pesar de todos estos pequeños fallos, parece ser que al coleccionista le ha encantado este camión, porque se están viendo auténticos disparates en el precio de venta por parte de los mercachifles de internet. Ya se sabe que cada uno con su dinero hace lo que quiere, o lo que le dejan hacer.

 

Las fotos del modelo real y las instalaciones han sido obtenidas de la propia web de UVESA www.uvesa.es, donde puede encontrarse más información al respecto. Aunque este camión y sus fotos corresponden a las instalaciones que esta empresa tenía para la producción de piensos, UVESA también se dedica a la reproducción, cría, despiece, procesamiento, envase y distribución de productos cárnicos, y están especializados en el cerdo y el pollo. Son todo un clásico y un referente en el sector desde hace décadas.