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| Transcripción fidedigna de la entrevista concertada con el Sr. Einstein, cuyo nombre vuelve a sonar para el Nobel. |
Tranquilamente acomodado en un butacón del hall del Hotel Sheraton de Nueva York, con una copita a medio llenar en la mesilla que nos separa, nos hallamos cara a cara con este genio de la ciencia. Con su característico aire absorto, como de estudiante despistado, melena con petardos recién explotados, y armado con su proverbial filosofía de andar por casa, a simple vista su aspecto no se corresponde en absoluto con la idea que uno tiene del científico probablemente más trascendental desde los tiempos de Newton. Siempre amable y cortés, ha accedido a dar esta entrevista, de la que su agente nos anticipó por teléfono que no habría ninguna cortapisa en los temas a tratar, salvo en el del tiempo disponible del propio interfecto, muy escaso, como es lógico. Es por eso que entramos rápidamente en materia:
- Sr. Einstein, para el gran público, para que puedan entenderle... ...básicamente ¿en qué consiste la Teoría de la Relatividad?
- Llámeme Frankonstin, se lo ruego, joven. Y... ...¡demonios! me gusta que me haga esa pregunta. Nunca entenderé porqué me otorgaron el Nobel por lo del efecto fotoeléctrico, y no por la Teoría de la Relatividad que, creo yo, es mucho más importante. Supongo que ese día aquellos suecos tenían muy poquitas ganas de trabajar... ...Verá, respondiendo a su pregunta, en realidad, todo es más sencillo de lo que parece. Partimos de la premisa de que cualquier tiempo pasado fue mejor, según el saber popular. Evidentemente, eso es opinable, y depende del cristal con qué se mire. Lo que fue bueno en su momento, es porque lo era, o así nos lo parecía, pero no tenía porqué ser realmente así, y tampoco tiene porqué seguir siéndolo ahora mismo. Puede que incluso fuera mejor aún. O peor, no lo sabemos... ...es que tengo antepasados gallegos ¿sabe?... El caso es que las etapas de la vida se suceden a través de constantes cambios de nuestros puntos de vista, y hay que saber valorar los pros y las contras en cada una de dichas etapas. Lo jodido del asunto es que cuando estamos en una etapa buena de la vida, muy pocas veces nos percatamos de ello. Solamente cuando se acaba lo bueno, nos damos cuenta que no supimos valorarlo en su justa medida. Cuando ya es demasiado tarde. Todo es relativo, pues, y más aún, en el caso del tiempo...
- Sr. Einstein ¿me está vd. diciendo que con sólo cambiar nuestra 'ubicación' en el tiempo, ha sido capaz de elaborar una de las teorías más importantes del siglo, por no decir de la historia?
- Frankonstin... Así es. Y le voy a poner un ejemplo que se entenderá fácilmente. Como muchos de ustedes saben, mi gran afición es coleccionar miniaturas de metal inyectado, que intentan reproducir lo más fielmente posible vehículos actuales o pasados. No hay muchos fabricantes buenos entre los que elegir, así que la frontera entre lo que se considera un juguete y un modelo para coleccionismo, es muy difusa. Ahora mismo tenemos a Märklin, Schuco, Dinky y alguna que otra marca de gran calidad, pero ¡a qué precios! Aunque no puedo quejarme, la verdad, me los puedo permitir, y además son una preciosidad, se lo aseguro. El caso, es que antes, cuando yo era un joven científico desconocido para el gran público, era muy aficionado a una marca española, JOAL. No es que fuera ninguna maravilla, pero sus modelos eran robustos, duraderos, y lo más importante: se notaba mucho que estaban hechos con cariño. Aquella gente era capaz de transmitir amor por lo que hacía y se notaba en sus creaciones. Y además, no eran para nada caros. Me los conseguía Pacorro, de la embajada española en Suiza. Hoy en día, yo los pondría sin dudar en la categoría de juguetes, pero ahora que esa marca ya hace tiempo que ha desaparecido, la verdad es que la echo de menos. No tiene vd. idea de cuánto lamento saber que ya nunca más tendremos nuevos moldes. Lo que le decía antes, ha tenido que desaparecer ese fabricante, para apreciarlo de verdad...
- Me va a disculpar, pero sigo sin ver la relación entre su afición y la Relatividad...
- Bueno, no se preocupe, joven. Es absolutamente normal, si no me quisieron dar el Nobel porque los científicos asignados para evaluar mi Teoría no entendieron ni papa, tampoco ahora podemos esperar milagros. Un tremendo error por mi parte. En su momento quizás tendría que haberla presentado en Powerpoint, con unos cuantos memes. Eso siempre gusta mucho.
- ¡Ejem! esto... ...dejemos a un lado el plano profesional, y entremos de lleno en el plano personal ¿se consideraría usted una persona religiosa?
- Por supuesto, ya sabe que en la disposición del Universo, Dios, el gran creador, no solo juega a los dados, sino que los lanza donde no podamos verlos. Yo diría aún más, el muy cabrón los tiene cargados...
- ¡¡Sr. Einstein !! digo Frankonstin... ...eh.. todo esto es muy... ...inapropiado.
- No se atribule, joven. He bajado de mi habitación antes de lo previsto, y ya me he apretado el segundo Kina, así que a lo mejor se me ha calentado el morro... ...quizás me haya venido un poco arriba, pero no es nada grave, se lo aseguro.
- De acuerdo, de acuerdo... ...prosigamos entonces con las preguntas, si le parece.
- Por supuesto, pero tenga en cuenta que el tiempo se le acaba. Soy una persona muy ocupada, he de hacer las maletas cuanto antes y tomar el avión para llegar esta misma noche a casa. Mañana toca limpieza de vitrinas...
- Eso está muy bien. Probablemente usted ya lo ha conseguido todo...
- ...así es, todito el catálogo de JOAL, al completo.
- Ya, ya, pero me refería a que ya lo ha conseguido todo en esta vida. A un hombre de su calibre ¿qué le queda por hacer? ¿qué objetivos se ha marcado a día de hoy?
- Pues verá, hace años, justo al salir de aquella ceremonia en que me dieron el Nobel, un joven periodista como usted me hizo esa misma pregunta, y recuerdo que le respondí que los objetivos vitales nunca se conseguían del todo. Que uno se marcha de esta vida sin haber completado sus planes. Le conté que, aún sí, en lo público, conseguí vivir junto a la mujer que amaba, tuve mi propia familia, triunfé en lo que me gustaba, me gané la vida razonablemente bien, y además el público me quería. Y en lo personal, conocí gente maravillosa, muy inteligente, de la que aprendí mucho. Viajé por medio mundo, conocí lugares y personas fascinantes, y en donde estuve, siempre me trataron a cuerpo de rey. A aquél periodista le conté entonces que solamente me faltaban dos cosas por hacer en esta vida: montar en globo, y que me metieran un dedo en el culo...
- ¡¡SEÑOR EINSTEIN!! ¡¿no sería vd. capaz de decir...
- ¡Claro que sí!, ya saben todos vds. de mi proverbial franqueza, y puesto que ahora usted vuelve a preguntarme por lo mismo, le diré que la respuesta sigue siendo la misma. Aunque ahora ya sólo me queda una cosa por hacer: montar en globo.
- Pfff, eeh, esteee, verá, si le parece, mejor vamos concluyendo. De toda la gente que ha pasado por su vida, ¿a quién dirigiría sus pensamientos? ¿de quién tiene el mejor recuerdo?
- Pues sería muy presuntuoso por mi parte, ponerme a juzgar a una sola cualquiera de las personas que han pasado por mi vida. No me gusta recordar a alguien en concreto, y tener que reducir mi experiencia con esa persona a un solo comentario... ...aunque siempre me quedaré con la espinita clavada de saber qué habrá sido de Pacorro.
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CATERPILLAR 920 - PALA CARGADORA
REFERENCIA 214 de la colección CLUB MINIATURAS COMPACT.
Esta pala de Caterpillar, supuestamente sería a escala 1/50, aunque la encuentro un poco más pequeña de lo que debiera. No importa a estas alturas, ni que tampoco hubiera disparidad de escalas entre los diferentes modelos, porque la finalidad era "jugar a construir" y JOAL tenía suficiente variedad de maquinaria para cumplir los exigentes sueños de los más pequeños. Tener el catálogo completo suponía un dineral y era casi imposible tenerlos todos, pero... ...¿para qué están los amigos?
La cabina es desmontable y tiene dirección operativa, al igual que la pala, que tiene movilidad completa.
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CATERPILLAR V60C - CARRETILLA ELEVADORA
REFERENCIA 215 de la colección CLUB MINIATURAS COMPACT.
La carretilla sí está claramente fuera de escala, porque en la caja indica 1/70, pero debe ser por lo menos 1/24, porque es un bicho de cuidado y además pesa lo suyo. La cubierta es de plástico y bastante frágil, pero lo demás, como fue habitual en los inicios de JOAL, parece hecho de adamantium.
Los cuernos son elevables a varias alturas, y como curiosidad, tiene un volante que opera realmente sobre la dirección trasera.
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CATERPILLAR 955L TRAXCAVATOR - PALA CARGADORA CON CADENAS Y RASTRILLADORA.
REFERENCIA 213 de la colección CLUB MINIATURAS COMPACT.
En la caja de esta pala también está mal señalada la escala (1/70), cuando debería ser 1/50 como mucho.
La cabina es desmontable, dejando ver un interior muy pobre, aunque la pala y el arado son muy jugables. Esta miniatura siempre ha tenido el inconveniente de que las 'cadenas' se salen con solo mirarlas.
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REFERENCIA 250 de la colección SERIE 200.
Avanzamos un poco en el tiempo, ya casi dentro de los ochenta, más o menos una década en la historia de JOAL respecto a la maquinaria de obra vista anteriormente y empezamos a comprobar que, debido a sus primeros problemas económicos, JOAL decide lanzar una miniserie orientada a la maquinaria agrícola, donde empieza a sobreabundar el plástico, más barato y manejable, pero curiosamente con menos detalles que el salpicadero de un Panda. Esta colección solía complementarse con aperos como la sulfatadora con pulverizador, la rastrilladora o el remolque con alpacas, pero todos ellos eran puro plástico, de colores chillones, y de poca calidad. Este tractor tuvo también otros colores, como el azul y el verde, siendo quizás el más común y correcto el azul, color insignia de Ebro. Para más inri, no tiene ni una sola pieza móvil, salvo los brazos traseros que suben y bajan, pero nada más.
Hubo alguna que otra reedición a mediados de los 90, pero los niños ya jugaban enchufados a una pantalla, y este tipo de juguetes hacía ya bastantes años que estaban en franco retroceso.
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REFERENCIA 275 de la colección SERIE 200 y/o de la reedición COMPACT.
Aprovechando que a mediados de los noventa, JOAL reeditó algunos de sus moldes más famosos de los setenta, tanto de maquinaria de obras como agrícola, decidió animarse a aumentar el catálogo de tractores y sacó, entre otros, este Landini, que aún en su simplicidad, no estaba mal. Pero sigue sin tener piezas móviles, por lo que se trata más bien de un modelo para coleccionar, que no para jugar. A priori, la escala es 1/43, y no a 1/32 como indica la caja.
Ya en pleno siglo XXI, la editorial Hachette publicó una colección de más de un centenar de modelos distintos de tractores, casi todos ellos de la marca Universal Hobbies, pero ésta se retiró faltando unos pocos números y Hachette tuvo que tirar de otros fabricantes, como Siku, Ros-Replicagri y Joal, del que sospecho que este Landini fue molde suyo.
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REFERENCIAS 203 y 204 de la colección SERIE 200.
La referencia nº 203 es común para ambos tractores, Ebro y Massey Ferguson, correspondiendo la nº 204 a la abonadora. Y no es de extrañar, porque los modelos reales tenían la misma base, solo que se trataba de una marca o de otra, dependiendo del propietario de la licencia de fabricación en ese momento.
A imitación de los Massey de Corgi, JOAL fabricó en algo parecido a 1/43, lo mismo que hacían los ingleses: un simpático tractor colorado con diversos complementos tales como el muñeco agricultor, la pala, el pulverizador o la abonadora. Pero cuando Massey Ferguson vendió sus acciones, Ebro comenzó a fabricar bajo su marca, y JOAL, yendo un pasito más allá, además de la modificación del frontal, sacó toda una combinación de colores distintos en ambas carrocerías, también en el muñeco y los complementos, variando entre el verde metalizado, el amarillo, el rojo, el verde chillón y el azul mecánico, tanto en el Ebro, como en el Massey, como en la propia abonadora.
La abonadora Massey Harris también la tuvo Corgi, y JOAL la plagió con muy pocas variaciones.
Estos tres modelos son ediciones originales, aunque han perdido, o están a punto de perder, los adhesivos de fábrica.
La abonadora Massey Harris también la tuvo Corgi, y JOAL la plagió con muy pocas variaciones.
Estos tres modelos son ediciones originales, aunque han perdido, o están a punto de perder, los adhesivos de fábrica.
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REFERENCIA 247 de la colección SERIE 200 y/o de la reedición COMPACT.
Esta cosechadora es relativamente moderna, y no me refiero al modelo real: es que cuando JOAL lo reeditó en los noventa me lo traje para casa sin pensarlo. En su momento se me escapó la cosechadora de cereal, y después he tenido que conformarme con ésta de maíz. Hubiese preferido el modelo con peine para cereal, pero con su caja incluida se me va de presupuesto, piden auténticas barbaridades.
Con ésta es suficiente para hacerse una idea del quilo y medio de metal puro que supone este mastodonte. En su caja dice que es a escala 1/42, y tal parece, por las medidas. Tiene peine elevable, sinfín extensible, tolva con apertura, y dirección trasera. Estoy seguro que los niños de este siglo ni sabrían decir qué aparato es éste. Creen que el pan crece espontáneamente en un horno, con sólo echar unos polvos mágicos.
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REFERENCIA 212 de la reedición de la colección CLUB MINIATURAS COMPACT.
Retornamos a la maquinaria de obras públicas, que junto con los coches, fueron con los que JOAL tuvo su mayor éxito en los 70. En su momento tuve varias unidades de su catálogo, pero los hijos, los primitos, sus amiguitos y el tiempo, acabaron por dispersar o destruir rápidamente todo ese patrimonio, como si fuera el desguace periférico de una ciudad de provincias cualquiera.
Así que cuando JOAL reeditó parte de su añejo catálogo, intenté reconstruir ese patrimonio de mi adolescencia. Uno de esos modelos era este Comet con volquete, que debe ser inventado, porque jamás he visto circular un remolque así, y menos de obras públicas, aunque nunca se sabe.
Hubo gran variedad de colores y otros modelos de Comet para otros servicios, pero es una lástima que JOAL solamente reeditase tan poquitos modelos, y no por ejemplo, el de cisterna CAMPSA, el de gas licuado de BUTANO SA o el que transportaba un gigantesco motor marino, todos ellos con dos ejes traseros.
También fue una oportunidad perdida el que no reeditaran los coches. Supongo que por asuntos de licencias. Dejando a un lado algunos deportivos, que eran medio inventados o no muy exactos con esos colores tan raros, recuerdo buenas reproducciones como el Simca 1000, el R-8, el R-10, el Seat 850, el 124, o el MB-300 SL, muchos de ellos con suspensión, puertas, y en algún caso capó o maletero, totalmente operativos. Más adelante tuvimos el Citröen CX, el Ford Fiesta, el Chrysler 150... ...en fín, hubo variedad donde elegir, y JOAL tuvo su momento, pero el cambio de gustos, la sofisticación de los juguetes y la falta de nuevas ideas e inversiones, dejaron tocada a la marca definitivamente.
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REFERENCIA 211 de la reedición de la colección CLUB MINIATURAS COMPACT.
Y finalmente, para la reconstrucción del "patrimonio" de juventud, tenemos este Comet con contenedor de escombros, que viene con una carretilla colorada de plástico como complemento. Tan fea, basta e irreal, que no he querido ni fotografiarla. La curiosidad de este Comet radica en que el sistema de descarga del contenedor es moderadamente operable, y permite cierto juego. También hubo sus correspondientes variaciones de color en cabina, chasis y contáiner.
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Lo mostrado es solamente una pequeña parte de todo lo que llegué a tener de JOAL, solamente conservo o he rescatado éstos. Fue una marca muy querida, pero también muy rápidamente olvidada. Si alguna vez alguien se atreviera a recuperar esos moldes, especialmente los de coches, y decidiera reanudar su fabricación, estoy seguro que clientes no faltarían. Como ejemplo tenemos recientemente la reedición de Dinky, con buen éxito. Pero tendrían que ser tal y como los que hizo JOAL, hierro puro, casi nada de plástico.
