PEGASO TRONER PLUS

Pegaso 1236.38T Troner Plus 360.

A raíz de la entrada anterior, dedicada al Tecno de cuatro patas, y sin salirnos de la actual colección en curso de Camiones y Autobuses Españoles, me gustaría traer a colación este otro modelo, el Troner Plus, miniatura a la que en mi opinión, no se le ha prestado la debida atención, y que apenas ha sido comentada en los mentideros de internet. Para empezar, quisiera remarcar el mal momento histórico-económico en el que apareció el modelo real, y en un segundo término, comentar la calidad de la propia miniatura.

Si bien el Mider y el Trakker aparecieron después del Troner, aquellos modelos en teoría estaban englobados dentro de la gama Tecno (T-2), por lo que puede considerarse al Troner, aparecido en Marzo de 1987 con la denominación interna T-3, como la auténtica novedad y el último modelo real fabricado en serie por Pegaso, más aún si tenemos en cuenta que también fue el último en dejar de ser producido.

Tecno y Troner juntitos. Aparecieron con muy poca diferencia de años entre sí. 

Es necesario recordar todo ésto, para contextualizar mejor la delicada situación en que se encontraba el fabricante español, en realidad todo el gremio, pues la crisis causada por la reconversión industrial estaba azotando España prácticamente a todos los niveles.

Astilleros, fundiciones y altos hornos, eléctricas, petroleras, incluso pequeños y medianos negocios satélites de este sector industrial no dudaron en aprovechar la ocasión que Europa y el propio gobierno español brindaron para que cerrasen por doquier. Se rompió la hucha para las prejubilaciones y se dio carta blanca a las autorizaciones y modificaciones legislativas necesarias para colocar o deshacerse de una gran cantidad de empresas públicas o semipúblicas que hacía años que ya no eran competitivas.

Y una vez más, pagaríamos la novatada de entrar en el tablero de juego de la economía continental, una partida para la que no estábamos preparados, y en la que para poder competir, tuvimos que hacer unos cuantos sacrificios. El precio que tuvimos que abonar fue la práctica desaparición de nuestra industria pesada y el tener que deshacernos de grandes empresas estatales deficitarias, todo ello en pos de una drástica disminución de deuda pública. El resultado casi inmediato fue un paro galopante, malestar social y huelgas generales, y sobre todo, la pérdida de posiciones en la escala mundial de todos esos sectores estratégicos, y que al final, nos supuso caer de la lista de los diez primeros países más desarrollados del mundo. Y aquí seguimos todavía, fuera de esa lista.

Pegaso Troner cabina TX en su, quizás, versión más común. 

Foto promocional de la serie 95 de DAF. 

Y por último el Seddon-Atkinson Strato 400, también de promoción. 

Pegaso no fue la excepción, y tuvo que recurrir a extravagantes alianzas comerciales para poder sobrevivir. Una de ellas fue resucitar el acuerdo de 1984 que mantenía con la holandesa DAF (y más tarde con la inglesa Seddon-Atkinson) para la creación conjunta de una nueva empresa, Cabtec, que desarrollaría una novedosa cabina, común a estas tres marcas, aunque con pequeñas variaciones entre sí. Casi simultáneamente, se utilizaría para equipar la gama Troner de Pegaso, la serie 95 de DAF, y la Strato de Seddon. El diseño corrió a cargo ni más ni menos que de Giugiaro. Y éste, cómo no, acertó de nuevo.

Existieron, bueno, existen aún, varios modelos de cabina: la corta sin habitáculo de descanso, otra más larga con espacio suficiente para una litera, otra también larga pero con el techo ligeramente sobreelevado, denominada TX y probablemente la más común, y finalmente la Plus, que consistía en la misma cabina corta pero con un exagerado techo sobreelevado, y que es la que constituye el motivo de esta entrada.

Por norma, la longitud máxima de todo el conjunto de transporte estaba limitada a ciertos estándares europeos, pero sin especificar qué parte correspondía a la cabina y cuál a la carga o arrastre. Aprovechando el vacío legal existente en ese momento, algunos fabricantes, entre ellos Pegaso, colocaron la litera y su contorno, encima de la cabeza del chófer, cuando realmente debería situarse detrás suyo. Muchos conductores, con cierta sorna, lo apodaron el palomar. Evidentemente lo que se buscó por parte de Pegaso fue ampliar la zona de carga, permitiendo un mayor aprovechamiento, pero sin pensar nunca en la comodidad del usuario.

Tampoco habría grandes alegrías en lo que se refiere a la cadena cinemática, pues de inicio, las prestaciones serían aún muy parejas a las del Tecno. No sería hasta el año 1992 cuando se dotó al Troner de nuevas motorizaciones, acercándose, o incluso alcanzando por fin la barrera de los 400 CV.

Para acabar de rematar la jugada, tampoco hubo fiesta para los cuatro patas, al ser reducida su M.M.A. a 32 toneladas, perdiendo así su razón principal de ser. Hasta 1991, fueron dueños y señores de las rutas nacionales, permitiéndose una MMA de 38 Tn., pero la Unión Europea, ante semejante despropósito de cabinas como las del Troner Plus, se dispuso a corregir rápidamente la normativa existente, ésta vez, para delimitar claramente los mínimos que debía tener la cabina, con especificación de altura, longitud y distancia a las que situar el conductor en la propia zona de conducción y en las de seguridad respecto a la carga.

Al poco tiempo Pegaso sería vendida al grupo industrial IVECO, y éste, tras cumplir unos mínimos de plazos y de inversiones se desharía del pozo sin fondo que suponía el fabricante español, por lo que en julio de 1993 saldrá de la factoría el último Troner. Y por eso se entenderá que este modelo con cabina Plus, sea probablemente el más raro de ver.  

Muchos nostálgicos pensarán que fue una decisión incomprensible y precipitada, pero si comparamos lo sucedido en otros países, entenderemos entonces porqué siempre Spain is different. Cuando en su momento los respectivos gobiernos “echaron una mano” a FIAT, a Renault o a Daimler-Mercedes, éstas consiguieron despegar y salir de sus respectivos baches. Aprovecharon la cobertura adecuada y propicia que se les brindó, y desde ese manto gubernamental lograron despegar. Sin embargo, en España Pegaso siempre fue deficitaria y dependiente del Régimen desde su creación, hasta su misma desaparición, ya bien entrados los noventa y en plena democracia consolidada. ¿Porqué aquí palmaron Pegaso, John Deere, Motor Ibérica, Santana y tantos otros si España a mediados de los ochenta era el quinto productor mundial de la automoción? ¿cómo pudo pasar ésto?

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Vayamos con la miniatura, sobre la cual pondremos el punto de mira en su tractora, pues el arrastre, como puede verse, es inmenso y largo como un día sin pan, y habla por sí solo. Me parece que trae un detallado de piezas superior a la media en estos coleccionables, y las grafías son muy resultonas. No soy transportista, y salvo mejor opinión, aquí todo parece en orden.

Según los escasos comentarios hallados en internet, este vehículo se utilizaba casi en exclusiva para trasladar piezas de la propia Pegaso a la factoría que Seddon tenía en suelo inglés, por lo que es presumible que fueran cabinas o partes de ella, así como algún que otro componente común entre ambas marcas. Excluimos la motorización, ya que los camiones ingleses los montaban de la marca Cummins.

Salvo los habituales pilotos naranja chillón y el sempiterno juego de cables trasero con bandera de Andorra, el resto de la miniatura llega a un gran nivel. El ensamblaje es bueno, y el dormitorio del ático no parece un pegote de plástico, sino un elemento más. Mejorable, sí, pero tampoco canta en exceso.

De pintura anda bien, porque se notan las franquicias de las puertas y las molduras de la cabina. Los pinchos de las luces esta vez son de los pequeñitos y no malogran el frontal.

En la zona de la quinta rueda, pueden verse tubos, calderos, calderines y depósitos con bastante empaque, así como estribos, plataforma y escape bien cromados a simple vista.

Me encantan esas ruedas, las cuales desconozco si le corresponderían en realidad. No me gustan tanto esos retrovisores y limpiaparabrisas plasticosos y jugueteros, pero claro, es que no se puede tener todo.

Pero vamos, que sin ser un Premium Classixxs, me parece de más calidad que el Tecno de las vigas, y por eso tiene su sitio en la vitrina, aunque solo la tractora, claro, porque el semi no hay donde ponerlo sin provocar un desalojo masivo.